Los egresados de la USJ Enrique Torguet y Manuel Castillo ganan un premio publicitario de prestigio mundial
Enrique Torguet y Manuel Castillo, egresados de Publicidad y Relaciones Públicas de la Universidad San Jorge de la promoción 2014, consiguieron un D&AD Pencil de Grafito, uno de los premios más prestigiosos del mundo en el ámbito publicitario, gracias a la campaña “Car Crashes”, que realizaron para Burger King y en la que promocionaban el lanzamiento del servicio a domicilio de la cadena de restaurantes en EEUU.
Los antiguos alumnos trabajan desde 2016 en la agencia de publicidad LOLA MullenLowe como creativos. “Se suele trabajar en duplas al crear las campañas, pero uno tiene el rol de director de arte y el otro de copywriter. Nosotros somos una pareja un poco rara porque ambos desempeñamos los dos papeles”, explica Enrique.
Para la campaña de Burger King, su función como equipo creativo fue llegar a la idea que posteriormente se desarrolló. “Encontramos una noticia de un coche que se había chocado contra uno de sus restaurantes y nos preguntamos si eso habría ocurrido más veces. A partir de ese dato salió la idea”, recuerda Manuel. Bajo el claim “Déjalo, ya te lo llevamos nosotros”, la campaña se ha utilizado en EEUU, Alemania, España y Brasil.
Sobre el premio conseguido, Enrique afirma que “es una alegría que un festival tan importante valore el trabajo” y asegura que estos reconocimientos les motivan a seguir. Aunque este es el primer D&AD Pencil a nivel profesional, durante su etapa de estudiantes en un máster en EEUU ya consiguieron un bronce con la campaña “BBC Swot” y una plata con “Toms Helpful Space”.
“Lo mejor de nuestro día a día es que no tenemos un día a día, porque el trabajo es muy diferente en función de los proyectos y las fases. Además, solemos estar inmersos en más de uno a la vez”, explica Manuel. Actualmente, San Miguel es la marca con la que más trabajan. También destacan la campaña para Orlando que finalizaron hace muy poco. “Se puede ver ahora mismo en televisión y le tenemos mucho cariño”, concluye Enrique.
