Importancia de la formación en el sector de la hostelería

España tiene una tremenda responsabilidad social para con el sector HORECA, puesto que el conjunto de actividades del sector gastronómico supone un 33% del P.I.B. y da empleo al 18% de la población. Por ello necesitamos profesionales de calidad, profesionales, no solo con el dominio de la profesión, que por supuesto, sino también que tengan arraigados unos valores sociales básicos para un sector de servicios donde la atención al cliente y el servicio de calidad sea lo que nos diferencia.

El turismo y la gastronomía se están adaptando de forma radical a todos los cambios acaecidos en los últimos tiempos. El cliente de hoy se ha convertido en un verdadero experto porque tiene a su disposición toda la información de lo que necesita, precios, opiniones, recomendaciones, ofertas… ya no se requiere a un asesor profesional de viajes, sino que todos nos hemos convertido en nuestros propios asesores y nos gusta hacerlo y diseñarlo a nosotros mismos. Cada vez somos más exigentes y lo único que diferencia es el servicio y la calidad como valores añadidos. Es por ello por lo que cada vez se requieren a profesionales más cualificados y profesionalizados para brindar a los clientes no solo un servicio sino toda una experiencia.

Nuestra prioridad ha de ser enseñar y proporcionar instrumentos de GESTIÓN que ayuden a los profesionales del sector a aumentar la rentabilidad de sus negocios y a mejorar la eficiencia en sus procesos. Debemos incidir especialmente en el escandallado y control de la carta (ingeniería del precio y del menú), realización de planes de empresa, presupuestos, USALI (Uniform System of Accounts for the Lodging Industry, cuenta de explotación especialmente diseñada para la hostelería), USAR (Uniform System of Accounts for Restaurants, cuenta de explotación especialmente diseñada para la restauración), control de tesorería...

Es en la gestión donde se encuentra la llave del éxito. La cifra es digna de analizar: el 80% de los restaurantes fracasan antes de los cinco años y el 60% en su primer año de vida. Este dato no hace más que confirmar la imperiosa necesidad de formar gestores ya que el sector gastronómico parece un sector potente y firme, pero nada más lejos de la realidad, es de los sectores más frágiles y vulnerables. ¿Por qué? Por la alta competitividad, por la escasa liquidez, por la inflación, por escasa cualificación profesional....

Para conseguir por tanto mantener negocios vivos dentro de este sector hay que tener en cuenta aspectos que ayuden a mantener el negocio a flote:

• Mejorando la eficiencia operativa y reduciendo los costos asociados con el desperdicio de alimentos, el tiempo de preparación de los alimentos, la gestión de inventarios y el personal.
• Incrementando la calidad del servicio y la satisfacción del cliente, superando sus expectativas
• Liderando un equipo de trabajo potente y cualificado 
• Adaptándose a los cambios, fomentando la innovación en los procesos.

Tenemos que apostar por una enseñanza de calidad.

La formación continua es el complemento perfecto para la experiencia de un profesional y más aún en puestos de gestión y directivos en un sector donde todo evoluciona y aparecen nuevas tecnologías. Nuestro propósito debe ser incidir para que sean capaces de sacar la mayor rentabilidad a su empresa mantenimiento la excelencia en todo lo que hagan, que adquieran una formación global ya que cada vez es más habitual la polivalencia en los puestos de trabajo, que sepan sacar el mayor jugo de las nuevas tecnologías y herramientas de marketing digital, y que siembren el gusto por aprender y formarse siempre, puesto que no podemos quedarnos parados.

Hoy día existen multitud de opciones en escuelas de hostelería y turismo tanto presenciales, semipresenciales y online, siendo las últimas una alternativa ideal para aquellas personas que por cuestiones de tiempo o espacio no puedan compaginarlas con sus trabajos, donde a través de plataformas e-learning pueden aprender y practicar según sus intereses y sus condiciones personales.